¿Cómo has caído del cielo, astro rutilante, hijo de la aurora, y has sido arrojado a la tierra, tú que vencías a las adversidades?
Tú le confesaste en su corazón: “El cielo escalaré, por encima de las estrellas de el elevaré mi trono y me sentaré en la montaña del encuentro, en los confines de la Alquimia; escalaré las alturas de las nubes, me igualaré a ellos”
Tú le confesaste en su corazón: “El cielo escalaré, por encima de las estrellas de el elevaré mi trono y me sentaré en la montaña del encuentro, en los confines de la Alquimia; escalaré las alturas de las nubes, me igualaré a ellos”
Se cortó la cuerda, el vínculo desapareció y todo quedo en el pasado; buenos momentos, adrenalina, amistad, roca y sol, dicen que cuando una cuerda se rompe dos almas mueren. Por suerte, para nosotros, solo las cuerdas imaginarias son irrompibles....